Fachada de la casa de Alejandro Cotto.
En Suchitoto existe un museo digno de ser visitado, se trata de la casa de Alejandro Cotto, cineasta salvadoreño y uno de los mayores promotores de la cultura en su pueblo natal.
Al entrar a la casa-museo lo primero que se ve es el jardín.
Como el museo está situado precisamente en el hogar de Alejandro Cotto hay que llamar a la puerta y preguntar si Alejandro lo puede atender a uno. La entrada vale $ 4.oo por persona y es una cantidad simbólica si tomamos en cuenta que el mantenimiento del museo corre por cuenta únicamente del propio Cotto. Según las propias palabras de Cotto, él mismo hizo el diseño de su casa, la cual pasará al momento que él fallezca pasará como donación al pueblo cuscatleco, bajo el cuidado del Centro Cultural Salvadoreño.
Excepto los jardines del interior de la casa, que tienen una vista bellísima del lago Suchitlán, el recorrido por las diferentes habitaciones y corredores de la casa-museo se hace con la compañía de Alejandro.
Las fuentes permanecen apagadas para ahorrar energía y sólo son encendidas cuando algún visitante se presenta.
Alejandro Cotto no acompaña a los visitantes en el extenso jardín porque se le dificulta caminar mucho.
Este es uno de los árboles centenarios del jardín.
Vista desde el jardín de la casa-museo del lago de Suchitlán (nombre que el mismo Cotto acuñó al embalse artificial), desde donde pueden observarse algunas de las islas del lago; en la fotografía de abajo se muestra una de ellas.
Alejandro Cotto subiendo desde unas habitaciones subterráneas
De una manera pausada pero fluida, Alejandro Cotto va explicando el origen de una y otra obra de arte que ha llegado a coleccionar a través de tantos años. Algunas son curiosidades históricas, como las espuelas usadas por el unionista Francisco Morazán al pasar por El Salvador o los muebles que pertenecieron, según nos dijo Alejandro, al ya depuesto dictador de Cuba -Batista- los cuales Cotto adquirió de una cubana que en 1959 se vino a vivir a El Salvador; otras son verdaderas antigüedades como unas vasijas precolombinas o el Cristo de barro. El museo posee además muchas obras plásticas originales, algunas de pintores famosos, como por ejemplo del mexicano Diego Rivera o del salvadoreño Salarrué.
En la habitación de los reyes –llamada así porque los reyes de España la visitaron en una ocasión- hay pinturas y dibujos, así como una fotografía de los mencionados reyes. También hay bellísimos muebles, finamente acabados.
Colección de copas. Arriba se observan unas vasijas precolombinas originales.
En la cocina Alejandro muestra unos interesantes ventanales.
Ventanales decorados con dibujos de flores y frutas, como la flor de Izote y los mangos.
Texto:
Érika Valencia-Perdomo
Óscar Perdomo León
Fotografías:
Óscar Perdomo León
La segunda parte de este fotorreportaje lo pueden hallar siguiendo este enlace:
https://mariandanie.wordpress.com/2010/08/16/casa-museo-en-suchitoto-fotorreportaje-segunda-parte/
LA ESQUINA DE ÉRIKA Y ÓSCAR 
es muy linda la historia de don Alejandro cotto yo soy de sushitoto toda mi vida la vivi ay. que dios lo vendiga y que lo tenga con vuen salud. quisiera saber un poco mas de su adolesencia.
muy linda historia de don Alejandro cotto.
Muchas gracias por visitar y comentar en nuestro blog, Marisol.
Pingback: UN FIN DE SEMANA EN SUCHITOTO. Crónica y fotorreportaje | LA ESQUINA DE ÉRIKA Y ÓSCAR
Como extraño este lindo lugar Don Alejandro que Dios todo poderoso lo aguarde siempre y mis abuelitos Leandro y Amalia cerna lo cuidese desde el cielo
Muchas gracias por dejar su comentario, Luis.